Una nación bajo Dios
| Artículos sobre |
 |
| Creencias falaces |
Mito
El Juramento de lealtad contiene las palabras "bajo Dios", demostrando que Estados Unidos de Norteamérica es una nación cristiana.
Prometo lealtad a la bandera
de los Estados Unidos de Norteamérica,
y a la república a la cual representa:
una Nación bajo Dios, indivisible,
con libertad y justicia para todos.
Refutación
El Juramento de lealtad ha sido recitado por decenas de millones de niños en edad escolar y es familiar para la mayoría de los estadounidenses, pero fue en 1950 cuando se agregó la parte de "bajo Dios". Muchos grupos ateos consideran que esas dos palabras son una violación a la Constitución que especifica que debe existir una separación entre Iglesia y Estado.
Ateos y algunos teístas argumentan que esta frase es fundamentalmente inmoral porque le dice a la gente que existe una conexión inherente, con apoyo oficial, entre el patriotismo americano y la creencia en un tipo particular de Dios. Este nacionalismo religioso está conectado a la violencia, la hostilidad y la desconfianza hacia ambos ateos y los disidentes minoritarios[1].
Debido a las palabras "bajo Dios", muchos consideran que el Juramento de lealtad no es simplemente una expresión de patriotismo, sino también una expresión de piedad religiosa. Además, se ha utilizado por muchos como evidencia de que Estados unidos es una nación religiosa; no simplemente en el sentido de que la mayoría de la gente es religiosa, sino más bien que el propio gobierno se funda en principios religiosos (típicamente cristianos)
Este argumento es profundamente erróneo. La primera razón es que el Juramento de lealtad no data de la fundación de Estados Unidos. Debido a que no fue creado hasta casi el final del siglo 19, no se puede leer como si dijera algo acerca de la naturaleza de los Estados Unidos, ya que este país fue fundado en el siglo 18.
En segundo lugar, las palabras "bajo Dios" son una adición más reciente.
Historia
Cuando el Juramento de lealtad fue originalmente escrito por Francis Bellamy el 11 de octubre de 1892, él no usó esas palabras en ninguna forma. Aquí está la promesa original de Lealtad:
Prometo lealtad a mi bandera,
y a la República a la que representa:
una nación indivisible,
con libertad y justicia para todos.
Esta primera versión apareció en la revista de Boston “The Youth's Companion”, donde Bellamy trabajó como gerente de circulación. A Bellamy se le pidió que escribiera un juramento para que fuera recitado por los niños al día siguiente, 12 de octubre, que era el Día de Colón. Esto inauguró la larga tradición en que los niños recitan el Juramento al comienzo de cada día escolar.
Desde entonces, el juramento ha sido objeto de varias modificaciones. El 14 de junio de 1923, en una Conferencia Nacional de la bandera en Washington, las palabras "mi bandera" fueron sustituidas por "la bandera de los Estados Unidos." Un año más tarde, las palabras se cambiaron de nuevo a "la bandera de los Estados Unidos de Norteamérica".[2].
Durante la década de 1950 las cosas empeoraron cuando la gente empezó a temer a los comunistas. El macartismo empezó en esa época y este término se utiliza hoy día en referencia a acusaciones (generalmente falsas) de deslealtad, subversión o traición a la patria sin el debido respeto a un proceso legal. Este episodio se desarrolló entre 1950 y 1956 durante el cual el senador Joseph McCarthy (1908-1957) desencadenó un extendido proceso de delaciones, acusaciones infundadas, denuncias, interrogatorios, procesos irregulares y listas negras contra personas sospechosas de ser comunistas. Los sectores que se opusieron a los métodos irregulares e indiscriminados de McCarthy denunciaron el proceso como una «caza de brujas» y llevó al destacado dramaturgo Arthur Miller a escribir su famosa obra Las brujas de Salem (1953)[3]. Bajo este tiempo mucha gente fue perseguida, se le negaba la oportunidad de empleo, e incluso eran encarcelados por ninguna otra razón que la de ser sospechosos de comunismo.
En un esfuerzo por vincular la unidad nacional con la oposición a "ateos comunistas", los Caballeros de Colón ("el fuerte brazo derecho de la Iglesia") hizo campaña para que las palabras "bajo Dios" fueran agregadas al Juramento. Esto fue en la misma época, y por la misma razón, que la frase "En Dios Confiamos" se colocó en las monedas y billetes creando un lema nacional.
En junio de 1954, los Caballeros de Colón lograron su objetivo y el presidente Dwight Eisenhower explicó su decisión de firmar el proyecto de ley al afirmar: "De esta manera estamos reafirmando la trascendencia de la fe religiosa en el patrimonio y el futuro de América".
El propósito de la adición se hizo más clara cuando Frederick Brown Harris, Ministro de la Iglesia Metodista Foundry y Capellán del Senado estadounidense, dijo el 14 de junio de 1954: "A partir de hoy, millones de nuestros niños en edad escolar habrán de anunciar todos los días en cada ciudad y pueblo, cada aldea y escuela rural, la dedicación de nuestra nación y nuestro pueblo al Todopoderoso."
Lo que es sorprendentemente irónico es que Bellamy era un ministro bautista que tuvo que dejar su iglesia a causa de sus opiniones políticas socialistas. En el momento de la adición anterior, la nieta de Bellamy se opuso a ella, ya que socavaría las intenciones originales de Bellamy. [4]
¿Es divisivo el Juramento de lealtad?
Cualquiera puede preguntarse si la frase "bajo Dios" en el Juramento es genuinamente divisiva. Según los grupos seculares la respuesta es claramente "sí". Incluso antes de la redacción actual, muchos Testigos de Jehová experimentaron ataques furiosos por negarse a recitar el juramento en la escuela. Los Testigos de Jehová se resisten a recitar el Juramento de lealtad porque le deben lealtad al Reino de Dios, el gobierno al que se refirió Jesús al decir: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada” (Mateo 24:14)[5], y además creen que honrar la bandera con saludos y reverencias, a menudo mientras se entona un himno, es un acto de culto que atribuye la salvación a la patria y a sus líderes, en vez de a Dios[6].
Con la adición "bajo Dios", se añade otra capa de la exclusión y división. ¿Qué hay de los estadounidenses que no creen en Dios, ¿qué pasa con las muchas interpretación de su existencia? Siendo una nación multicultural, en Estados Unidos existen muchas denominaciones religiosas con diferentes percepciones de Dios. En los tribunales estadounidenses los testigos ponen sus manos sobre la "Biblia" y jura decir la verdad absoluta, ¿es esto una farsa, una burla de la religión, porque hay quienes denuncian su existencia. El "Juramento de lealtad" no especifica qué denominación se está reconociendo, o es la interpretación y la práctica de la adoración. Una nación bajo Dios, qué importa si una persona es musulmana, católica, protestante, o de la fe judía, ¿deben los tribunales incluir una biblia, el Libro de Mormón y el Corán también?
¿Qué pasa con aquellos que pueden querer comprometerse y reconocer a la "Virgen María" o Alá, quizá Jehová? ¿La verborrea utilizada realmente define la connotación? El concepto de "una nación bajo Dios" es tan complicado que debe ser eliminado o redefinido en referencia al Juramento de lealtad y las actuaciones judiciales tal y como piden los ateos. La diversidad religiosa en Estados Unidos está tan extendida que es imposible vincular a todos bajo el mismo significado integral del Juramento[7].
Véase también
Referencias y ligas externas
(Nota de la administración) Algunas ligas podrían estar rotas o algunos videos pueden haber sido eliminados.
|