Secta destructiva
| Definiciones ampliadas |
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| Secta destructiva |
Una secta destructiva es todo aquel grupo que, en su dinámica de reclutamiento y/o adoctrinamiento, emplee técnicas de persuación coercitiva que propicien la destrucción (desestructuración) de la personalidad previa del adepto o la dañen severamente. Una secta destructiva puede ocasionar la destrucción total o severa de los lazos afectivos y de comunicación efectiva del sectario con su entorno social habitual y consigo mismo. Así mismo, puede considerarse una secta destructiva a la que en su dinámica de funcionamiento le lleve a destruir, a conculcar, derechos jurídicos inalienables en un Estado de Derecho. En este contexto, una secta destructiva exhibe una devoción excesiva a una persona, idea o cosa y que emplea técnicas antiéticas de manipulación para persuadir y controlar (a sus adeptos); diseñadas para lograr las metas del líder del grupo; trayendo como consecuencias actuales o posibles, el daño a sus miembros, a los familiares de ellos o a la sociedad en general.
Una secta destructiva no se crea desde el principio para ser tal, ni con conciencia de tal, sino que evoluciona mediante actitudes psicopatológicas imprevisibles a partir de un núcleo sectario normal. En ocasiones es muy difícil detectarlas si no se conoce con cierta profundidad su dinámica interna.
Diez puntos para detectar una secta
Se han seleccionado diez puntos definitorios que podrían constituirse en elementos de análisis para detectar si algún determinado grupo ha adoptado ya una dinámica de secta destructiva o estuviese en camino de hacerlo.
- Ser un grupo cohesionado por una doctrina demagógica y encabezado por un líder carismático que pretender ser la misma divinidad o un elegido por ella, o bien un poseedor de “la Verdad Absoluta” en cualquier ámbito social.
- Tener una estructura teocrática, vertical y totalitaria, donde la palabra de los dirigentes es dogma de fe. Los líderes intervienen hasta en los detalles más íntimos y personales de los adeptos y exigen que sus órdenes sean ejecutadas sin la menor crítica.
- Exigir una adhesión total al grupo y obligar (bajo presión sicológica) a romper todos los lazos sociales anteriores a la entrada del culto: padres, pareja, amigos, trabajo, estudios, etc.
- Vivir en una comunidad cerrada o en total dependencia del grupo.
- Suprimir las libertades individuales y el derecho a la intimidad.
- Controlar la información que llega hasta sus adeptos, manipulándola a su conveniencia.
- Utilizar sofisticadas técnicas psicológicas y neurofisiológicas (enmascaradas bajo la “meditación” o “renacimiento espiritual”) que sirven para anular la voluntad y el razonamiento de los adeptos; causándoles, en muchos casos, alteraciones psíquicas graves.
- Propugnar un rechazo total a la sociedad y de sus instituciones. Fuera del grupo todos son enemigos (polarización entre el Bien/Secta y el Mal/sociedad, la sociedad es basura y las personas que viven en ella sólo interesan en la medida que puedan servir al grupo.
- Tener como actividades primordiales el proselitismo (conseguir nuevos adeptos) -realizándolo de forma encubierta e ilegítima- y la recaudación de dinero (cuestaciones por las calles, cursos, actividades comerciales e industriales e incluso, en algunos grupos, actividades claramente delictivas. En el caso de las sectas multinacionales, el dinero recaudado es enviado, en buena parte, a las centrales de cada grupo.
- Obtener, bajo coacción psicológica, la entrega del patrimonio personal de los nuevos adeptos a la secta o de grandes sumas de dinero en concepto de cursillos o auditorías. Los miembros que trabajan en el exterior del grupo tienen que entregar todo o en gran parte de su salario a la secta. Y los que trabaja en empresas pertenecientes al grupo, no cobran salarios (las nóminas de esas empresas de la secta sólo son una cobertura legal, ya que nunca se llegan a hacer efectivas -o devuelven luego el dinero- para sus miembros/mano de obra).
Proselitismo
Las sectas destructivas hacen su proselitismo de manera tal que puedan filtrar grandes cantidades de personas, para así poder detectar a los individuos más frágiles. No se puede negar que emplean una amplia gama de procedimientos manipulatorios que logran que los prospectos queden adscritos a la red sectaria a través de un proceso ajeno a su voluntad.
Mercadotecnia sectaria
Las divergencias que puede haber entre las diferentes sectas destructivas se debe principalmente a las distintas imágenes publicitarias que se emplean para hacer proselitismo. De este modo, en la secta CEIS emplea la cobertura de consultorios psicológicos (tratamiento de problemas de pareja y sexuales) y esotéricos (adivinación del futuro y espiritismo), encontramos muchos adeptos que entraron a una secta por conflictos de pareja, homosexualidad y abundan los que quedaron afectados por la muerte de un ser querido. En la secta de la Cienciología, que pone un gran énfasis en la rehabilitación de adictos a la drogas, encontramos un número infrecuente de personas con este problema.
Referencias y ligas externas
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