Mineke Kamper
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Mineke Kamper | |
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Información Biográfica | |
Información Personal | |
Ocupación | Pseudoterapias |
Afiliación | |
Acusación |
Las muertes de Jacqueline Alderslade y Paul Howie
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Mineke Kamper, es una autoproclamada homeópata (aunque no registrada ni calificada como tal) y homeosectaria del condado de Mayo, uno de los condados tradicionales de Irlanda,[1] que fue acusada de aconsejar a sus clientes que descontinuaran sus medicamentos recetados y, en vez de eso, tomaran sus remedios.
Antecedentes
Kamper, nacida en los Países bajos, participó en un curso por correspondencia de homeopatía auspiciado la Escuela de homeopatía en Devon, Inglaterra, sin embargo, de acuerdo con ejecutivos del lugar, abandonó la escuela en el año 2000, razón por la cual no está acreditada para emplear esta pseudoterapia en ningún tipo de paciente.
Stuart Gracie, el director del curso, dijo que Kamper solo alcanzó el nivel básico en el tratamiento que ha estado prescribiendo a personas gravemente enfermas.
De acuerdo con Gracie, Kamper dejó el curso a medias. Alcanzó un nivel de certificado básico y, por definición, esto no es una calificación profesional completa. "Ella tenía un largo camino por recorrer", dijo el director del curso. Gracie también comentó que el curso completo dura cuatro años y que solo unas partes del mismo podían hacerse por correspondencia. El certificado que habría recibido establece claramente que el titular ha logrado comprender los principios de la homeopatía clásica en preparación para estudios avanzados adicionales y nada más. No le daba una certificación para atender pacientes y mucho menos cambiarles los tratamientos convencionales que los pacientes ya estaban tomando.
Acusaciones
Kamper fue acusada de la muerte de dos personas:
- Paul Howie, quien falleció debido a un tumor canceroso en el cuello que un patólogo, en su investigación, descubrió que podría haberse fácilmente extirpado con cirugía convencional. Kamper diagnosticó erróneamente que Paul padecía un trastorno de hierro, y el jurado agregó un "punto" al veredicto de muerte por causas naturales, y aconsejó a cualquiera que busque un tratamiento alternativo que primero consulte a un médico. John O'Dwyer, el forense, dijo que parecía que Howie estaba equivocado y mal informado. O'Dwyer dictaminó que Howie no debería haber muerto. Agregó que esta era la segunda muerte en su experiencia en la que un profesional de 'medicina alternativa' le había aconsejado al paciente que suspendiera los tratamientos convencionales.[2]
- Jacqueline Alderslade, de Hollymount en el condado de Mayo, murió el 9 de julio de 2001 a los 55 años de edad. Su diario fue revisado en su investigación y se demostró que la señora Alderslade había registrado que Kamper le había aconsejado que dejara el medicamento que había estado tomando, a excepción de un inhalador Ventolin (marca de salbutamol, una sustancia broncodilatadora empleado en personas que sufren ataques de asma). Kamper negó la acusación, pero tampoco asistió a esa investigación.
Sobre el caso Howie, Kamper declaró a los gardai (la fuerza policial del estado de la República irlandesa) que había sido enfermera registrada durante 25 años y que llegó a Irlanda en 1980 con una pediatra consultora (solo identificada como Dra. Briel) con la que Kamper solía trabajar como enfermera pediátrica. Posteriormente se formó como reflexóloga y comenzó a practicar medicina alternativa. Dijo que había estudiado homeopatía pero que no terminó sus exámenes finales. "Estudié todo lo que necesitaba saber", comentó.[3]
Referencias y ligas externas
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