Marcial Maciel
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Marcial Maciel |
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| Información Biográfica | |
| Nombre Real |
Marcial Maciel Degollado
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| País |
 México
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| Lugar |
Michoacán, México |
| F. de Nacimiento |
10 de marzo de 1920 |
| Fallecimiento |
30 de enero de 2008 |
| Afiliación | |
| Acusado de |
Abuso sexual a menores
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Marcial Maciel fue un sacerdote mexicano, nacido en Michoacán, y un criminal sexual pedófilo. Fue fundador de la asociación seglar Regnum Christi y de la congregación católica Legión de Cristo (cuyos miembros son conocidos como los "legionarios de Cristo"). De sus acusaciones de pedofilia y pederastia jamás fue juzgado ni condenado, salió impune a pesar de las denuncias.
Pedófilo y pederasta consumado
Maciel es considerado el mayor depredador sexual en la historia reciente de la Iglesia católica con apetito insaciable por menores de edad a quienes les obligaba a proporcionarle favores sexuales en contra de su voluntad. Esta bestia se tomó exageradamente en serio los versículos bíblicos donde Jesús dice "Dejad que los niños se acerquen a mí".[1]
Antecedentes
Maciel fue acusado formalmente de cometer abusos sexuales por varios miembros de la congregación y estudiantes de los establecimientos de los legionarios a partir de 1997, aunque hay constancia de la existencia de quejas desde los años 1940, según declara el diario español El País.
Un informe de la congregación sostiene que, desde 1941 a la actualidad, 175 menores de edad fueron víctimas de abusos sexuales, cometidos por un total de 33 sacerdotes de la congregación, según un documento presentado por los Legionarios de Cristo el sábado 21 de diciembre de 2019.[2] Se sabe que Maciel abusó sexualmente de 60 menores.[3] La "gran mayoría", admiten, fueron niños adolescentes de entre 11 y 16 años.[4]
El informe de la congregación sería presentado el 20 de enero de 2020 en la reunión de su Capítulo General, máxima autoridad de los Legionarios de Cristo. El proceso contra los pervertidos acusados podría enfrentar dificultades debido a que 14 de los 33 sacerdotes que son señalados como abusadores secuales ocupan altos puestos de autoridad en la congregación, de la cual se sabe gusta de obstaculizar los procesos que buscan justicia.[5]
El tema del abuso sexual de niños en la Iglesia Católica despertó la alarma de la jerarquía, los sacerdotes y los fieles en las dos últimas décadas del siglo pasado, particularmente en los Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Irlanda, Australia y Austria. Solo en los Estados Unidos desde principios de la década de 1980, se estima que 800 sacerdotes han sido acusados de abusar de menores, lo que le costó a la iglesia unos 650 millones de dólares en costos legales y médicos para víctimas y perpetradores.[6]
Acusaciones
Maciel era un pederasta bisexual, le agradaban más los niños de tez blanca y rubios. En cuanto funda la orden en 1946 forma una especie de harén y empieza a abusar sistemáticamente desde el principio. Le gustaban rubios y blanquitos. Les hacía ir a su habitación y les decía que tenía permiso del Papa para que le dieran masajes. Esas víctimas eran demasiado pequeñas para entender qué sucedía. Les decía que el Papa le daba permiso para que lo masturbaran. Algunas de las víctimas fueron violadas a partir de los ocho años y de manera sistemática durante diez o quince años. Era adicto a las drogas y eran testigos de cómo se inyectaba.[7]
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Después de concluir sus estudios como seminarista, Maciel fundó la congregación religiosa de los Misioneros del Sagrado Corazón y la Virgen de Dolores, que tuvo que cambiar de nombre luego de que se revelaran los primeros abusos sexuales cometidos por Maciel, además de su adicción a la morfina también.[8]
En 1956, el arzobispo de México y el obispo de Cuernavaca denunciaron por pederastia y adicción a las drogas a Maciel ya que era adicto al analgésico controlado, y del que se requiere una receta especial, clorhidrato de petidina (también conocido como meperidina, con las marcas comerciales Dolantina y Demerol), pidiendo su suspensión temporal. Durante algunos años (al final del pontificado de Pío XII y el de Juan XXIII) Maciel fue apartado temporalmente de la dirección del instituto.[9] Aún así, nada sucedió. Nueve años más tarde, el Papa Pablo VI otorgó el Decreto de Alabanza a los Legionarios de Cristo, asegurando el financiamiento, la expansión y continuidad de la Legión. No obstante, la verdadera época de bonanza e impunidad de Maciel llegó a partir de 1978, con la llegada de Juan Pablo II al frente de la Iglesia.
Encubrimiento
La Santa Sede había recibido las primeras denuncias de abusos contra Maciel en 1948, pero no se hizo nada en contra de él ya que contaba con el total apoyo de Carol Wojtyla (Juan Pablo II) quien hizo caso omiso a las denuncias que, desde 1988, lanzaron algunos de los primeros integrantes de la Legión de Cristo. El sacerdote Félix Alarcón, una de las primeras víctimas del depredador Maciel declaró: “Todos en el Vaticano lo sabían, y nadie hizo nada”.[10]
Juan Pablo II ordenó bloquear el asunto. También se permitió entonces que Maciel construyera su entramado empresarial para evadir impuestos entre los años 1990 y 1992, cuando todavía gozaba de la protección del Vaticano. Según publicó El Confidencial en su investigación de los Papeles de Panamá, el negocio de las universidades vinculadas a la congregación religiosa con más de 300 millones de patrimonio, se administró desde territorios opacos.[11]
Las personas que denunciaron el caso de abuso sexual dijeron que se presentaron a hacerlo porque el Papa Juan Pablo II no respondió a las cartas de dos sacerdotes enviadas a través de los canales de la iglesia en 1978 y 1989 en busca de una investigación. Lo que hizo la Iglesia en 1994 fue elogiar a Maciel afirmando que este animal era una "guía eficaz para la juventud".
En febrero de 1997, un grupo de ocho ex legionarios –entre ellos Félix Alarcón y Juan José Vaca– lograron que la denuncia contra Maciel alcanzara los medios de comunicación internacionales.
Maciel era amigo de varios papas y era mimado por incontables obispos y cardenales, muchos de ellos españoles. En 2006, como resultado de un proceso canónico interrumpido, la Santa Sede indicó el retiro de Maciel del ministerio sacerdotal. El mismo año, el ex papa Benedicto XVI le pidió a Maciel que se fuera a México y que dedicara el resto de su vida “a la penitencia y la oración”. Murió sin pedir perdón dos años más tarde, cuando una comisión de investigación ya había desvelado sin ningún género de dudas sus actividades delictivas y una vida de crápula tolerada por el Vaticano.[12]
Cuando se hizo público el anuncio del Vaticano de que no se tomarían medidas contra Maciel, aquellos que lo acusaban de haber abusado sexualmente de jóvenes seminaristas a su cargo hace años se sorprendieron. El ex sacerdote Juan José Vaca, de Holbrooke, N.Y., que una vez dirigió la orden en los Estados Unidos y que se convirtió en profesor adjunto de psicología y sociología en Nueva York, dijo que se sintió traicionado. "Estoy más que molesto", dijo, "He perdido toda la fe en la iglesia".[13]
Elena Sada, hija de una prominente familia de Monterrey y autora del libro Blackbird, declaró que a los 19 años ingresó en el movimiento Regnum Christi, creado Maciel en 1959, del que también forman parte los Legionarios de Cristo, y se convirtió en una de las “consagradas” de esa organización, directora vocacional en Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Sada tenía como objetivo reclutar “a la mayor cantidad posible de mujeres y niñas” para la congregación. A los 37 años escapó literalmente de la institución y se refugió en Manhattan, donde comenzó un proceso de reinvención lejos de la influencia de Maciel.
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De acuerdo con una entrevista con el medio Milenio, Sada dijo de Maciel " (que) tenía una capacidad increíble de manipular y engañar a las personas [...]. Maciel nos hizo pensar que él era un santo y que gozaba de cierta clarividencia por su cercanía a Dios. Te convencía de que él sabía más de ti de lo que tú y tu familia sabían. De hecho, te manipulaba para que dudaras del juicio de tus padres."[14]
En una entrevista para la la revista católica Vida Nueva, el cardenal João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, declaró que desde 1943 el Vaticano tenía documentos sobre la pederastia de Marcial Maciel. El religioso fue investigado entre 1956 y 1959. “Quien lo tapó era una mafia, ellos no eran Iglesia”, ha dicho João Braz.
En ese tiempo, la congregación de los Legionarios de Cristo emitieron una declaración donde afirmaron que Maciel, en ese entonces de 76 años, era el objetivo de una conspiración de hombres con "venganzas personales contra él" para "fabricar cargos devastadores" y destruir su posición.[15]
En 2009 saltó a la luz la noticia de que Maciel era padre de una joven española. A través de un comunicado en febrero de 2010, la Legión de Cristo reconoció las acusaciones de abuso sexual a menores y se desvinculó de su fundador.[16]
Respuesta papal
El 24 de febrero de 2019, el papa Francisco prometió que tomaría "acciones concretas" para acabar con el abuso sexual a menores dentro de la Iglesia Católica, al finalizar una cumbre histórica sobre el tema que se realizó en Roma.[17]
John O'Reilly, de la congregación de los Legionarios de Cristo de Chile, fue condenado en 2014 a cuatro años y un día de libertad vigilada, tras ser declarado culpable de abusos contra una menor de edad. En México la Iglesia no se pronunció al respecto.[18]
Parodia y sátira
En la página satírica Reporte Mendigo, se publicó en línea un texto donde supuestamente un grupo de religiosos católicos habrían abierto una petición en Change.org para que el 30 de abril, día del niño en México, sea designado como "Día de Marcial Maciel", para conmemorar la estrecha relación de éste sacerdote con la niñez mexicana. En la página se puede leer que "El padre siempre quiso rodearse de almas puras para elevar su espiritualidad; jamás hubo manoseos sino caricias, no hubo abuso sino misticismo, todo cariñito suyo era una bendición porque ese hombre era un santo". La organización católica, sigue el texto, acentuó que ningún padre puede ser señalado de pecar porque ellos tienen el poder de perdonarse a sí mismos, por lo que la idea de llamarlos pecadores es absurda y a los ojos de Dios.[19]
Referencias y ligas externas
(Nota de la administración) Algunas ligas podrían estar rotas o algunos videos pueden haber sido eliminados.
| P Depredadores sexuales
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| David Richards ♦ Dwight York ♦ Ernest Angley ♦ George Pell ♦ Gilbert Gauthe ♦ Harry L. Thomas ♦ James David Manning ♦ Luis Fernando Figari ♦ Luis Fernando Intriago Páez ♦ Marcial Maciel ♦ Naasón Joaquín García ♦ Ravi Zacharias ♦ Sathya Sai Baba ♦ |