La Marcha del Progreso
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La ilustración llamada La Marcha del Progreso muestra la evolución del ser humano de manera exacta y de acuerdo al conocimiento recabado por científicos.
Historia
La Marcha del Progreso, o simplemente "la Marcha de Progreso", es una de las más famosas y reconocibles ilustraciones científicas jamás producidas. Una presentación de 25 millones de años de evolución humana comprimida y que representa 15 antepasados evolutivos humanos alineados como si estuvieran marchando en un desfile de izquierda a derecha. La imagen se ha copiado, modificado y parodiado en innumerables ocasiones y ha resultado ser polémica en varios aspectos.
La ilustración fue originalmente encargada por Time-Life Books para el volumen Hombre Primitivo (Early man) de 1965, de su popular vida Biblioteca Naturaleza de Life. Este libro, escrito por el antropólogo Francis Clark Howell (1925-2007) y los editores de Time-Life, incluyó una sección plegable de texto e imágenes (páginas 41-45) titulado "El camino hacia Homo sapiens", con la secuencia de figuras dibujadas por el conocido pintor de historia natural y muralista Rudolph Franz Zallinger (1919-1995). A partir de la derecha y avanzando a través de cuatro páginas más, se ven los hitos de la evolución de primates y humanos tal como los científicos los conocen hoy en día, armados a partir de la evidencia fósil fragmentaria.
Refutación
Aunque el contexto indica que no era la intención del autor o el ilustrador implicar un desfile ancestro-descendiente de modo lineal, cuando la popularidad de la imagen creció y alcanzó el estatus de icono, el nombre de "March of Progress" se le quedó.
Durante el siglo XX, los extraordinarios hallazgos de antepasados se multiplicaron, y han esclarecido cada vez más la incógnita del origen del Hombre. Aunque escaso, el registro fósil es la fuente más rica de información que poseemos para conocer la historia evolutiva y el modo en que se llevó a cabo.
Contrario a lo que la ilustración de Zallinger muestra, la evolución humana no fue un proceso lineal. Las diferentes especies de homínidos no se sucedieron paulatinamente unas a otras en el tiempo, desde un simio hasta llegar al Homo sapiens, sino que que existieron varias especies que llegaron a coexistir en un mismo lugar.
A pesar de que en muy pocas ocasiones se han encontrado restos de dos o más especies en un mismo sitio -como en el caso de Homo sapiens y Homo neanderthalensis en algunas cuevas europeas-, se conoce que algunos fueron contemporáneos e incluso llegaron a convivir.
El Australopithecus afarensis, por ejemplo, vivió durante 700 mil años junto al Australopithecus africanus, pero mientras el primero fue exclusivo del este de África, el segundo habitó el sur del mismo continente.
También se han encontrado pequeñas poblaciones de una especie que habitó en el territorio de otra, como el A. africanus que coexistió con el Homo habilis por casi 200 mil años y éste último a su vez, durante un tiempo, compartió terreno con el Homo erectus.