Adán y Eva

Mitología

Religiosa

Adán y Eva, según el mito de la creación de las religiones abrahámicas, fueron el primer hombre y la primera mujer en el planeta Tierra. Son fundamentales para la creencia de que la humanidad es, en esencia, una sola familia, con todos descendientes a partir de un solo par de ancestros originales. También proporciona la base para las doctrinas de la caída del hombre y el pecado original que son creencias importantes en el cristianismo, aunque no se sostienen en el judaísmo o el Islam.

Antecedentes

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En el Libro de Génesis de la Biblia hebrea, capítulos uno al cinco (llamado Pentateuco), hay dos narraciones de la creación con dos perspectivas distintas. En el primero, Adán y Eva no tienen nombre. En cambio, Dios creó a la humanidad a la imagen de sí mismo y los instruyó para que se multiplicaran y fueran administradores de todo lo que Él había hecho. En la segunda narración, Dios forma a Adán del polvo y lo coloca en el Jardín del Edén. A Adán se le dice que puede comer libremente de todos los árboles en el jardín, a excepción de un árbol conocido como "del conocimiento del bien y del mal". Posteriormente, Eva se crea a partir de una de las costillas de Adán para que sea su compañera. Ambos son inocentes y no tienen vergüenza por su desnudez. Sin embargo, una serpiente engaña a Eva para que coma la fruta del árbol prohibido, y ella le comparte a Adán. Estos actos les brindan conocimiento adicional, pero les brinda la capacidad de evocar conceptos negativos y destructivos, como la vergüenza y el mal.

Posteriormente, Dios después maldice a la serpiente y al suelo. Dios proféticamente le dice a la mujer y al hombre cuáles serán las consecuencias del pecado de desobedecerle. Luego los expulsa del Jardín del Edén.

La historia se sometió a una extensa elaboración en las tradiciones abrahámicas posteriores, y ha sido ampliamente analizada por los eruditos bíblicos modernos. Las interpretaciones y creencias con respecto de Adán y Eva y la historia que gira en torno a ellos varían según las religiones y sectas; por ejemplo, la versión islámica de la historia sostiene que Adán y Eva fueron igualmente responsables de sus pecados de arrogancia, en lugar de que Eva fuera la primera en ser infiel. La historia de Adán y Eva se representa a menudo en el arte, y ha tenido una influencia importante en la literatura y la poesía.

La historia de la caída de Adán a menudo se considera una alegoría. Hay evidencia física de que Adán y Eva nunca existieron; los hallazgos en genética son incompatibles con la existencia de un primer par de seres humanos.

Judaísmo

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También se reconoció en el antiguo judaísmo, que hay dos narraciones distintas para la creación del hombre. El primer relato dice 'hombre y mujer [Dios] los creó', lo que implica creación simultánea, mientras que el segundo relato dice que Dios creó a Eva después de la creación de Adán. El Midrash Rabba - Génesis VIII: 1 reconcilió a los dos al afirmar que 'varón y hembra los creó', lo que indica que Dios creó originalmente a Adán como hermafrodita, corporal y espiritualmente, tanto masculino como femenino, antes de crear a Adán y Eva como el seres separados. Otros rabinos sugirieron que Eva y la mujer del primer relato eran dos individuos separados, el primero fue identificado como Lilith, una figura descrita en otro lugar como un demonio femenino nocturno.

Según la creencia judía tradicional, Adán y Eva están enterrados en la Cueva de Machpelah, en Hebrón.

En el judaísmo reformista, Harry Orlinsky analiza la palabra hebrea nefesh en Génesis 2: 7, donde "Dios lanza su aliento por la nariz del hombre y se convierte en nefesh hayya". Orlinsky sostiene que la traducción anterior de la frase 'alma viviente' es incorrecta. Señala que 'nefesh' significa algo así como la palabra inglesa 'ser', en el sentido de un cuerpo corpóreo capaz de vivir. El concepto de 'alma' en el sentido moderno, no existía en el pensamiento hebreo hasta alrededor del siglo II AEC, cuando la idea de una resurrección corporal ganó popularidad.

Islam

En el Islam, los musulmanes miran con reverencia a Adán, cuyo papel es ser el padre de la humanidad. Eva (Ḥawwāʼ; árabe: حواء) ​​es la 'madre de la humanidad'. La creación de Adán y Eva se menciona en el Corán, aunque diferentes intérpretes ofrecen diferentes puntos de vista sobre la historia de la creación real.

En el tafsir de al-Qummi, una exégesis sobre el Corán por Ali Ibn Ibrahim Qomi, en el Jardín del Edén, ese lugar no era enteramente terrenal. Según el Corán, tanto Adán como Eva comieron el fruto prohibido en un Edén celestial y como resultado, ambos fueron enviados a la Tierra como representantes de Alá. Cada persona fue enviada a la cima de una montaña: Adán en al-Safa y Eva en al-Marwah. En esta tradición islámica, Adán lloró 40 días hasta que se arrepintió, después de lo cual Dios envió la Piedra Negra, enseñándole el Hajj (o Peregrinación). Según un hadiz profético, Adán y Eva se reunieron en la llanura de ʻArafat', cerca de La Meca. Tuvieron dos hijos juntos, Qabil y Habil (Caín y Abel, posiblemente). También hay una leyenda de un hijo más joven, llamado Rocail, quien creó un palacio y un sepulcro con estatuas autónomas que vivieron las vidas de los hombres de manera tan realista que se creyó que poseían alma.

Referencias y ligas externas

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